Un estudio pequeño pero con resultados interesantes encontró que cuando la gente se expone a más luz a primeras horas de la mañana, en vez de más tarde, tiende a ser más delgada que sus compañeros.
“Este es un estudio inicial, pero ciertamente vimos una asociación robusta entre la cantidad y el tiempo de exposición a la luz, y el peso,” explicó la Dra. Phyllis Zee, directora del centro de trastornos del sueño en la Escuela de Medicina de la Northwestern University Feinberg, en Chicago.
“Estábamos muy interesados en ver la relación entre la iluminación y cómo puede afectar al peso” mencionó la investigadora. El estudio incluyó 54 adultos, veintiséis eran hombres, la edad promedio fue 31. A todos se les colocó un dispositivo especial en la muñeca para monitorizar la exposición a la luz, el punto medio del sueño y la duración del sueño durante una semana.
El peso y la talla provinieron del autorreporte de los pacientes. Los investigadores calcularon el índice de masa corporal (IMC), que es una estimación aproximada de la cantidad de grasa en el cuerpo. Los participantes también registraron su alimentación durante la semana del estudio.
La Dra. Zee dijo que la asociación más fuerte se vio en gente expuesta a luz de al menos 500 lux, el equivalente a un cuarto interior bien iluminado. Un día soleado puede proveer 1000 lux o más, mientras que la mayor parte de las habitaciones tienen entre 200 y 300 lux.
“Por cada hora más tarde en la que alcances los 500 lux, eso se traduce en un incremento de 1.28 del IMC. Mientras más temprano la exposición, más bajo el IMC,” explicó la Dra. Zee.
Hay muchas formas en las cuales la luz puede influenciar el peso. Una es alterando los ritmos circadianos –el reloj interno del cuerpo- para permitir un mejor sueño. La luz de la mañana también puede alterar a las hormonas que controlan el apetito y el metabolismo.
Aún cuando los investigadores controlaron otros factores potencialmente adelgazantes, como la ingesta calórica, la duración y tiempo del sueño, además de que quienes madrugan puedan tener una mayor actividad física, la exposición a la luz parece aportar hasta el 20% del IMC, de acuerdo con los investigadores.
¿Significa esto que la gente que vive en latitudes más soleadas sería más delgada que aquella que tiene menos luz durante el día? Tal vez, dijo la Dra. Zee, aunque no se incluyó esa comparación en el estudio actual. “La gente tiende a perder más peso en el verano, cuando tiene luz desde horas más tempranas,” añadió.
Dentro de las recomendaciones derivadas del estudio, exponerse a luz de 20 a 30 minutos de luz brillante matutina entre las 8am y el medio día pueden ser beneficiosas para el control de peso. “Cuando sea posible, expóngase a la luz temprano, camine al trabajo si es posible. La luz brillante de exteriores puede estar mucho más arriba de los 500 lux. Si no es posible salir, una opción es trabajar bajo una ventana. Si no hay ventanas disponibles, asegúrese de estar en una habitación bien iluminada.”
Aunque el estudio es pequeño y no hace ninguna intervención, plantea una pregunta interesante y, ante la epidemia de obesidad mundial, puede resultar una ayuda que vale la pena observar.
El estudio se publicó el 2 de abril en el journal PLOS One.
Pintura del encabezado: Morning Sun, Edward Hopper
Texto traducido y adaptado de Health Day